TILCARA Y EL URANIO

RECLAMAN UNA LEY

Crece el temor en Tilcara por la posible instalación de una mina de uranio

Organizaciones sociales e integrantes de pueblos originarios se unen en su lucha contra las mineras en Jujuy. (Foto Pro-Eco). La reciente ordenanza que prohíbe explotaciones mineras en esa localidad jujeña no genera tranquilidad en la población. Organizaciones del NOA trabajan en la búsqueda de una ley provincial que frene los 400 proyectos mineros que se esparcen en esa provincia. El rechazo de la población tilcareña al proyecto para la instalación de una mina de uranio en la cercana localidad de Juella (ubicada a 8 kilómetros) no es más que una de las tantas reacciones populares que se vienen desarrollando en Jujuy, de cara a los 400 emprendimientos mineros desplegados por la norteña provincia. Tras la marcha realizada en Tilcara, el 10 de julio pasado, en contra de la explotación de un yacimiento de uranio (se ubica en la localidad de Amarillo, entre Juella y la quebrada de Yacoraite) por parte de la firma canadiense Uranio del Sur, ahora el objetivo de las organizaciones sociales de la región es consolidarse de cara a la lucha antiminera que pretenden entablar. En este sentido, referentes de la Asamblea Socio-Ambiental del NOA (Asanoa), representados por miembros de la ONG tucumana Pro-Eco, mantuvieron durante la semana una serie de encuentros con organizaciones de esa provincia, entre ellas la influyente Tupaj Katari, a fin de iniciar un trabajo masivo de concientización y resistencia frente a la delicada realidad ambiental que, según denunciaron, pone en serio peligro al equilibrio de la Quebrada de Humahuaca, declarada Patrimonio Cultural y Natural de la Humanidad en julio de 2003 por la UNESCO. Consultada por primerafuente, Myriam Genisans (Pro-Eco) comentó que el proyecto de explotación de uranio tilcareño, que se encuentra en una instancia de cateo, encontró una fuerte resistencia de las comunidades locales, consientes del impacto que esto causaría. De hecho, la dirigente ambiental comentó que el temor en esa zona, por parte de la población, es tan grande, que la sanción de una ordenanza, por parte del Concejo Deliberante local, que impide la radicación de nuevas explotaciones mineras metalíferas a cielo abierto y las que utilicen sustancias químicas, poco pudo hacer para aplacar el malestar de la gente, que mantiene sus dudas en cuanto a la eficiencia del proyecto. “En realidad, la gente busca una ley provincial que los ampare de la minería destructiva. La fuerza de una norma que frene la gran cantidad de explotaciones ya iniciadas, las que se iniciarán y las que alguna vez fueron trabajadas y que ahora se intentan volver a poner en marcha”, agregó Genisans, antes de partir a San Carlos, en los Valles Calchaquíes salteños, donde el proyecto minero de Don Otto ya despertó la reacción vecinal.